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La Diputación de Castellón adelantará un total de 38 millones de euros a 55 ayuntamientos de la provincia que lo han solicitado como adelanto al dinero que deberían recibir en verano por la recaudación de tasas e impuestos que gestiona la institución provincial. Este anticipo servirá para que los consistorios atiendan sus compromisos, tanto para pagar nóminas a sus trabajadores como facturas a sus proveedores.
El vicepresidente económico de la Diputación, Miguel Barrachina, ha indicado que “entra en el normal funcionamiento de los ayuntamientos solicitar un crédito de anticipo para poder afrontar sus pagos hasta que reciben el dinero del cobro de tasas y tributos, lo que nosotros hacemos es proporcionárselo a unas condiciones más ventajosas al ser la Diputación quien lo solicita a las entidades financieras”.
En ese sentido, la Diputación asume esta operación de crédito ante la imposibilidad de que lo puedan hacer los propios ayuntamientos, o al menos en unas condiciones tan ventajosas como las que pueden conseguir al ser la Diputación la que hace de avalista. Con ello, la Diputación actúa de “banco bueno”, al garantizar la llegada de un dinero que los consistorios necesitan ya para hacer frente a sus pagos.
Tal y como ocurrió el pasado ejercicio, el presidente de la Diputación ha encargado al vicepresidente Barrachina que el anticipo de la recaudación esté antes que nunca a disposición de los ayuntamientos, para que puedan atender sus pagos de enero. Una diligencia que también se ha llevado a cabo en la presentación de los presupuestos, ya aprobados en el pasado pleno ordinario del mes de noviembre.
Hay que tener en cuenta que de los 38 millones que han solicitado los ayuntamientos, 35 se ingresan a través de esta operación de crédito, mientras que los tres millones restantes los aporta la propia Diputación. Esto, junto a los menores intereses que los bancos ofrecen a la institución provincial, supone un considerable ahorro en gastos financieros para los municipios.
Frente a los 69 municipios que pidieron ayuda en 2013, de cara a 2014 serán 55 los municipios que reciban hasta el 75% de adelanto de la recaudación de impuestos como el IAE o el IBI, que se suelen cobrar en verano. “Esto permitirá que los ayuntamientos obtengan dinero a un interés más reducido que el que obtendrían si fueran directamente a solicitar un crédito y, además, reciben financiación durante los meses más duros y con mayor desfase entre gastos e ingresos, ya que la recaudación de los tributos más importantes no llega hasta casi el otoño. Afortunadamente las necesidades municipales se han estabilizado y 2014 se presenta con las mejores perspectivas”, ha concluido Barrachina.
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