Las marcas Pentium y Celeron han identificado a varios de los procesadores lanzados por Intel desde la década de 1990. Esta historia tan dilatada, sin embargo, pronto llegará a su fin. El fabricante estadounidense sustituirá ambas designaciones por Intel Processor, un apelativo más sencillo.
De esta manera, este nuevo nombre se usará para agrupar en una misma categoría a los procesadores Pentium y Celeron, Según Josh Newman, vicepresidente de Intel, esta medida simplificará a los usuarios la selección de un CPU de bajo consumo.
No obstante, es necesario mencionar que este cambio sólo afectará a los futuros procesadores móviles de Intel, lanzados para portátiles, dado que los procesadores de bajo consumo para PCs de escritorio seguirán comercializandose bajo las marcas de Pentium y Celeron.
Por otro lado, los procesadores Core de gama alta, que incorporan las tecnologías vPro y Evo, tampoco sufrirán ningún cambio de nombre, tanto en PC como en portátiles.
Asimismo, es importante tener en cuenta que el cambio de nombre solo afectará a nivel de denominaciones comerciales. La arquitectura de los procesadores se mantendrá inalterada.
Justo como enfatiza el presidente de Intel, esta medida ayudará a los consumidores a elegir un procesador de bajo consumo de Intel, dado que los procesadores lanzados bajo las marcas Pentium y Celeron ya son técnicamente muy similares entre sí. Estos no ofrecen tanta potencia como la línea Core, pero tienen un consumo energético más bajo, así como un precio más asequible.
La fecha para este cambio es tan pronto como 2023. No obstante, la fecha de lanzamiento del primer portátil que incorpore un CPU Intel Proccesor, aún no se ha anunciado. En enero del próximo año, durante la conferencia de Intel en el CES 2023, los consumidores probablemente podrán ver el diseño de los nuevos procesadores. No obstante, es posible que el hardware no llegue a las tiendas hasta la segunda mitad de 2023.